La carta del loco. Versión femenina re-potenciada.

Me divorcio de mí.

Por medio de la presente carta, les hago saber mi decisión de finalizar la relación personal que mantengo conmigo misma desde Julio del año 1986. Hoy decidí ser egoísta, me he enamorado y a ello obedece toda esta revolución que siento en mi interior y aunque solo confío el amor de mi Aureliano a las ideas delirantes que habitan en mi cabeza, no tendré temor de arriesgarme a competir por un lugar en su corazón. Lo cierto es que si se puede amar a dos personas a la vez, amo a Aureliano y me amo a mi misma, en virtud de ello me veo en la penosa obligación de divorciarme de mi, desde hace ya algunos años que no podía tolerar mas ciertas situaciones conmigo, mi personalidad evitativa con temor a arriesgarse, mi pesimismo, ya no me repetía a mi misma cuanto me amaba, ni me disculpaba por lo errores que a veces cometía, tampoco me alababa cuando las cosas salían bien; lo cierto es que ya no existe lugar para dos en mi, he instalado un generador en mi interior para producir energía y repartir el excedente entre los demás, por otro lado mi corazón ha crecido dos tallas, aun así el espacio parece reducido y la convivencia ya no es tolerable. He decidido cambiar, ser diferente a como soy ahora y mas parecida a lo que siempre quise ser.

Ver las cosas como son y no como quieres que sean.. a propósito de un caso.

                                  Empieza por ti mismo

Las siguientes palabras están inscritas en la tumba de un obispo (1100 d.c.) en la

cripta de la abadía de Westminster:

Cuando yo era joven y libre y mi imaginación no conocía límites, soñaba con

cambiar el mundo. A medida que me fui haciendo mayor y más prudente, descubrí que

el mundo no cambiaría, de modo que acorté un poco la visión y decidí cambiar

solamente mi país.

Pero eso también parecía inamovible.

Al llegar a mi madurez, en un último y desesperado intento, decidí avenirme a

cambiar solamente a mi familia, a los seres que tenía más próximos, pero ¡ay!, tampoco

ellos quisieron saber nada del asunto.

Y ahora que me encuentro en mi lecho de muerte, de pronto me doy cuenta: «Sólo

con que hubiera empezado por cambiar yo mismo», con mi solo ejemplo habría cambiado

a mi familia.

Y entonces, movido por la inspiración y el estímulo que ellos me ofrecían, habría

sido capaz de mejorar mi país y quién sabe si incluso no hubiera podido cambiar el

mundo.

Anónimo

La carta del loco

Me levanto y elevo una alabanza al universo por mi vida, agradezco por tenerlo todo,  he despertado,  aun puedo respirar, correr,  estoy al tope de mi plenitud, un inagotable rio de éxtasis se desborda dentro de mi y brota regando riquezas ilimitadas a todo mi alrededor. Aunque no puedo ver los rayos del sol todo consciente, el viento me ha dicho que hoy irradia al máximo y que aguarda a mi encuentro con el.  Amo todo aquello que me rodea, amo al universo en el norte, en el sur, en el este y en el oeste, en la vía láctea, bailando sobre la fértil tierra viviente bajo mis pies, pero sobre todo me amo, amo mis pómulos, mi sonrisa, mis abrazos, mis besos, mi ser. Esta vez charlo con mi corazón, tiene algunas cosas que contarme, me apresura a tomar algunas decisiones, se agita al tratar de explicarme cosas que a menudo no logro entender, en las noches se haya mas tácito y puedo comprenderlo con facilidad,  me pregunta por su otra parte y no se como decirle que ella ya no esta, intento apaciguarlo al creer que pronto volverá, pero en el fondo se que su sabiduría infinita percibe mi engaño.